Por unas recomendaciones de teología-metafísica me había interesado por las obras del padre Osvaldo Lira (chileno), y para cachar qué tal le busqué alguna entrevista en Youtube.
Resulta triste que alguien del que se dice era tan versado en la materia terminara siendo un completo imbécil e intentara manipular el cristianismo a su antojo para justificar su defensa y amistad con Pinochet. Y la cosa no termina sólo con él, sino que el vejete fue el mismísimo profesor de Jaime Guzmán.
Con ese prontuario resulta difícil darle una oportunidad a su obra, por mucho conocimiento que acumulara, las piruetas mentales que hay que hacer para justificar una tortura bajo el supuesto paradigma católico, son dignas de acróbatas profesionales.